CRUCIGRAMA 33
La pasión desmedida.
Voy a inaugurar un álbum de estas "delicatesen" para “etiquetar” a los cañones de la "guerra"... A ver si hay quien hace diana en tan “ojeada” y "manida" silueta… porque, apremia el rastreo de los mástiles de desalmadas consciencias, testigos de cargo de las noches ausentes, de las palabras huecas, del silbido cálido de los cuerpos... de la infidelidad retozona y compartida, casi como un deporte para “desembriagarnos” de la rutinaria cotidianeidad… Cabrá el roce invisible de lo nuevo… ese “danddy” que ronda… esa mueca tímida y convincente de eso que llaman “amor a primera vista”… eso de amar con todas las vueltas y piruetas… eso!!! .... Pero, qué rayo es entonces?… Qué es?
El amor? ... Ah!!, el amor, el amor , el ... Alguien sabe, acaso, qué carajos es? De qué está hecho? Qué material o sustancia lo conforman? Qué divinidad lo ilumina en “sus altares” o le esconde de sus sufridas angustias? Es acaso una píldora dorada, un antídoto fértil ante la infidelidad, una receta de cocina, una coartada equilibrista del llanto, un adiós roto entre el océano, un ticket de viaje, una factura a pagar o un par de zapatos para descalzarse de la vida y andar y andar y no parar con la tierna insensatez de entregarse al rito de amar, amando? … una cábala, un pergamino, un papiro, un jeroglífico cavernario… dónde está escrito?... qué leyes lo rigen?.. Qué naturaleza procrean su existencia? ... En qué mercado está en venta?... A qué precio?... Hay fábricas para “troquelar amores”? ... Y periódicos para “anunciarle?
... Alguien sabe?... el amor es solo una abstracción cómplice, una lúdica venganza del tiempo de estar sin existir, la cual existe piadosa y meticulosamente, sin necesidad de presencia... un juego en el que se gana perdiendo y, en mucho, también se pierde ganando... una adivinanza “coqueta” cual sin señas ni motivos consigue ser adivinada; un truco sin magos que si prescinde de magia; algo suelto, frágil, a veces mezquino, otras, inquilino eterno de los sueños y de sus “bordados” derroteros; ilusión inminente y postrera que solo admite la pasión ciega y el desarraigo de la duda; pasatiempo aventurero, audaz, torpe, juguetón, curador de heridas y distancias, de miserias y avaricias, de lujurias y razones; árbol fecundo de la vida en pos de sus rumbos y diatribas, sentimiento fiel a toda hora y circunstancia, amigo de la libertad y sus compromisos, barco caprichoso, cual sin miramientos, pone proa rumbo al sortilegio de mares y destinos, alma silvestre, vagando a solas, de playa en playa, de ola en ola (como en la trovada) y a la vez, honrado de asumir la impostergable excusa de seguir vibrando con la emoción de esa página nítida y argentada, ese rostro existencial y transparente de sentirse amarrado al sentimiento de vivir y morir, amando...
Pero, qué es, entonces? Qué carajo es?...
Robert C. Díaz - Desde Londres.